Un nuevo espíritu
Un nuevo espíritu
Hoy contaré mi testimonio sobre un nuevo espíritu que recibí en Cristo Jesús. Dios les bendiga amados hermanos en Cristo, que alegría poder compartir mi testimonio, mi nombre es Nancy Prado. Soy de Ecuador nací en un hogar católico, pero mi abuelos maternos se convirtieron a Cristo cuando yo tenía unos 12 años. Las oraciones de ellos estaban dando frutos y gran parte de la familia estaban siendo alcanzados por su gracia y su perdón. A mis 22 años salí de mi país emigre a España y allí viví casi 13 años, nunca deje de creer en Dios, pero vivía una vida desordenada, tuve problemas de salud que los médicos dijeron que me impediría ser madre y ese era mi sueño, un día hablando con Dios le dije, Señor! sáname dame un hijo/a y Él me escucho me sano de un tumor y me convertí en madre. Después de un año volví a mi país con mi hermosa hija, y cuando ella tenía 5 años mi hermana la lleva a la escuelita dominical donde ella se congregaba, mi hija vino emocionada porque ese día le habían hablado, que Dios es el mejor padre que podemos tener porque Él nunca nos va abandonar, ella solo había visto a su papá antes de su primer año así que ella no se relacionó con él y tenía esa carencia afectiva pero aquel día Dios lleno ese vacío en su corazoncito. Dejo de llorar por su papá y eso hizo que yo empezara a buscar a ese Dios que consoló a mi pequeña, pasaron muchas cosas pero con cuerdas de amor Él me trajo a sus pies y un 7 de enero del 2018 baje a las aguas pero no fue hasta el 1 de febrero del 2019 que tuve un encuentro con Dios que cambio mi vida por completo. Fui liberada en medio de la alabanza, y hoy estoy en el ministerio de alabanza. Quiero seguir creciendo en el conocimiento de las escrituras, y agradezco a ILC, que me permite hacerlo Dios siga bendiciéndoles grandemente. Un amigo que está en Bruselas me hablo de ILC.
Les daré un nuevo corazón, y les infundiré un espíritu nuevo; les quitaré ese corazón de piedra que ahora tienen, y les pondré un corazón de carne. Infundiré mi Espíritu en ustedes, y haré que sigan mis preceptos y obedezcan mis leyes. Vivirán en la tierra que les di a sus antepasados, y ustedes serán mi pueblo y yo seré su Dios.