¡Llamado de Dios!
¡Llamado de Dios!
En este testimonio contaré sobre e hermoso ¡llamado de Dios! Dios les bendiga y guarde siempre. Soy Carmen, 46 años de edad, venezolana, médico especialista madre de 3 hijos, creyente; acudo a la iglesia Luz del Mundo Pentecostal, ubicada en un pueblo del Estado Monagas. Mi madre es creyente, tengo 3 hermanos y mi 2do hijo esta bautizado. Fui llamada a seguir los pasos de Jesús desde los 11 años, cuando a través de una visión el Señor me hablo y dijo que yo era su hija y que me mostraría su camino para mí en la tierra. “Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios”. Romanos 8:14 Desde allí hice un gran recorrido según la voluntad de mi Señor por diferentes templos, recibiendo distintas enseñanzas cada una duraron lo que el Señor dispuso en mi vida. Inicie un recorrido por un desierto árido desde mi juventud, matrimonio y estudios profesionales; pero siempre a la mano de Dios. Dentro de ese desierto me toco aprender sobre guerra espiritual y defenderme en el mundo de todos los que practican la idolatría; obedecer al Señor en lo que me indicaba para guiar a los hijos del mundo y enfermos. Ha sido un largo recorrido, hoy día el Señor me ha llamado al bautismo y su propósito en mi es ayudar a través de la guía por su Santo Espíritu a la edificación de iglesias y greyes. He visto como el enemigo ha sujetado el lugar donde me encuentro, hay poco avivamiento, el fuego se estaba apagando en la grey, y los enemigos se muestran abiertos dentro del propio templo, los cuales están vencidos por la Sangre de Cristo Jesús. Gran desafío el obedecer al Señor; pero en Cristo todo se puede. Amén. Por ese llamado, he sentido una necesidad de instruirme aún más en los caminos de Dios “pues ninguna profecía fue dada jamás por un acto de voluntad humana, sino que hombres inspirados por el Espíritu Santo hablaron de parte de Dios (2 Pedro 1:21)” y buscando cursos gratuitos encontré este ILC que se adapta a mi tiempo, finanzas y llega en la distancia. Espero obtener sabiduría, entendimiento, los frutos del espíritu santo; seguir obedeciendo al Señor, bautizarme y cumplir la voluntad del Todopoderoso. Deseo ser hija de Dios 100% y ser Salva por la Gracia de Cristo Jesús; en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
