El Propósito de Dios
En mi testimonio quiero compartir con todos que confío en el propósito de Dios. Dios no nos ha creado y redimido sin un propósito, al contrario, Dios ha planeado nuestra vida para bendecirnos y hacernos bendición. Por esa razón confío en el propósito de Dios para mi y para todos los que lean este testimonio.
El Señor cumplirá su propósito en mí. Me llamo Minerva Simbrón V. tengo 42 años, vivo en Poza Rica, Ver. Nací en una comunidad de Papantla, Ver. En un hogar no cristiano, mi papá era alcohólico, agresivo, en mi niñez me acercaba Dios en oración pidiendo un cambio en la familia, pese a las circunstancias, pero era parte del propósito salimos de ahí a Poza rica, fue un cambio por la misericordia de Dios. Mi tía cristiana hasta la fecha fue quien me invitó a la iglesia. Cuando llegue a los servicios recordaba que la maestra de catecismo nos advirtió de las religiones protestantes, entonces me vi en la necesidad de comprobar que lo que predicaba el pastor era verdad, empecé a estudiar la biblia, no recuerdo cuando me convertí a Cristo, recuerdo haber hecho la oración de fe y creí fervientemente lo que decía las escrituras.
El Señor Jesús me transformo poco a poco, ya que mi corazón estaba lleno de amargura y tenía un corazón de piedra, pero oré al Señor Jesús por un cambio radical. Entre a un Instituto en el año 2000, pero no termine porque me fui a trabajar a otra ciudad, después mi vida espiritual se apagó, aunque nunca me fui de la iglesia, por mis malas decisiones me junté con un hombre no cristiano del cual tengo una niña de 10 años, pero cometió adulterio con otra integrante de mi familia, esa situación provocó una revolución en mí, pero el Señor Jesús tuvo misericordia me ayudo a salir del pozo, recupere mi primer amor al Señor. Actualmente he sido transformada en mi forma de vivir y quiero compartir al mundo lo que Jesús ha hecho en mi vida, tengo poco tiempo libre y mi deseo es dedicarlo para estudiar la biblia, vivir en santidad en el Señor y prosigo el blanco perfecto que es Cristo. Debido a mi deseo por conocer y compartir de Cristo, buscando en la red encontré I.L.C., me pareció interesante tener una formación estructurada, para ayudar en la iglesia donde me congrego