POR SU GRACIA Y SU MISERICORDIA

Que la gracia y la paz de nuestros salvador JESUCRISTO sea contigo. Mi nombre es Heider, soy el menor de 5 hermanos hijo de padres colombianos, mi madre es descendencia de la etnia indígena arawak y mi progenitor tiene las raíces de su ancestros en el norte de Santander. Vivimos mucho tiempo en la zona costera de Colombia, el evangelio llegó a mi familia por medio de una tía que se convirtió a CRISTO, en mi adolescencia no tuve ninguna especia de atracción por las cosas de DIOS, no teníamos esa devoción en casa. Siendo un adolescente recuerdo que mi familia pasó por situaciones muy difíciles, lo cual repercutió en parte de mi crianza, esto me llevó a tomar malas decisiones en mi vida, cometí muchos errores estuve extraviado perdido en los placeres y en el delito acumulando pecados que me denigraba, mis malos actos trajeron consecuencias graves en mi vida y mi familia por lo que terminé privado de mi libertad por más de 5 años siendo un menor de edad inicie este proceso, por la misericordia de DIOS sé que pide permanecer con vida y fué en ese lugar donde estuve cumpliendo la responsabilidad de mis actos dónde por primera vez escuché y tuve más acercamiento al evangelio de la verdad aunque no afirme mis pasos en CRISTO, a mis 23años DIOS en su infinita bondad me permitió recuperar mi libertad y ocurrieron muchas cosas sentía que la muerte me perseguía para destruirme, fué allí donde en un evento no planificado decidí acompañar a mi madre quien ya había entregado su vida a CRISTO, la acompañe aún servicio de culto en un barrio cercano nadie me invitó, solo quería darle a mi madre los mejores últimos momentos conmigo ya que sentía que mis días se estaban agotando en esta tierra, fué en ese evento donde me sentí muy raro, sudaba sin parar sentía que no era mi lugar y quería salir corriendo, en medio de la predicación hubo un momento dónde sentí que un viento soplo y se llevó ese calor que sentía y de repente mi atención se fijó en el mensaje de arrepentimiento y perdón que ese día expusieron, recuerdo las pregonaciones de aquel predicador que con toda su pasión en el mensaje decía: «arrepiéntete, CRISTO te quiere perdonar hoy puede ser tu última oportunidad» en un momento algo lleno mi corazón de quebranto y me hizo levantarme de la silla y tirarme en el altar sin que aquel predicador hubiera terminado, recuerdo que lloraba como nunca lo había hecho y de rodillas decía: » perdóname, perdóname, soy basura de este mundo, no merezco nada pero por favor perdóname» oí una voz que me dijo: perdonalos sino no te perdono! Recuerdo que cuando salí de el estado en el que me encontraba el culto se había terminado y solo me estaban esperando a mí para cerrar el lugar desde esa noche mi vida cambió, se rompieron todas las cadenas y ataduras que no me dejaban ser libre, a los pocos días me bautice y a los meses recibí el don del Espíritu Santo con poder de DIOS cómo dice la escritura, desde que tuve este encuentro con DIOS me he dedicado a servir llevando la preciosa semilla en la ciudad donde actualmente vivo, sé que DIOS me ha salvado y me ha llamado a servir hoy tengo a mi esposa, mi hija y a mi madre que tuvo fe y oró varios años para que DIOS me rescatará gracias doy a DIOS por ella que clamó y le creyó a DIOS sé que su fe y la de los que oraron por mí hizo que DIOS tuviera misericordia de mi, hoy he decidido desarrollar el ministerio que DIOS me ha dado, he podido ser testigo de sanidades, milagros y manifestaciones poderosas del Espíritu de DIOS en este tiempo, sé que DIOS me ha llamado para alcanzar a las almas con su poder como lo hizo conmigo, DIOS me ha enseñado en este corto tiempo el amor por la obra que ÉL inicio y anhelo cumplir el propósito; con el ánimo de afianzar más el conocimiento y la práctica de la palabra empecé a buscar la oportunidad de estudiar algo relacionado con el campo ministerial al ver muchas opciones me animé pero mis recursos no me alcanzaban para cubrir los gastos, seguí indagando y encontré la oportunidad que ofrece el ILC y me lance a la Ventura de mirar si era cierto y hasta este punto puedo decir que siento algo en mi ser que se regocija de saber que aún hay personas guiadas por el Espíritu Santo para dar continuidad a la comisión del maestro de hacer discípulos y prepararlos para cumplir la misión, tengo muchas expectativas y le pido a DIOS que me ayude a cumplir el propósito en esta oportunidad, que DIOS bendiga a todos los que hacen posible la promoción de estas oportunidades y que DIOS recompense todos sus esfuerzos. Que la paz de CRISTO sea en sus corazones. Amén