Preparación Ministerial Gratuita y Online
Preparación Ministerial Gratuita y Online

El IlC ofrece preparación ministerial gratuita y online para todos los interesados en llevar el Evangelio y compartir las maravillas del Señor Jesucristo.

Sanen enfermos, limpien leprosos, resuciten muertos y expulsen demonios. Den gratuitamente lo que gratuitamente recibieron.

Mateo 10:8

Hace varios años nos encontrábamos con mi esposa y dos hijos hasta el momento, en una situación muy difícil, después de una pérdida económico total por la mala administración y el mal uso de los recursos en cosas del mundo. Con una educación católica tradicional, seminarista, sin el mínimo interés en el conocimiento del Evangelio y mucho menos en el cristianismo. Veía las iglesias cristianas con burla. En dos o tres o más ocasiones contendí con los Testigos de Jehová pues yo era quien en mi ignorancia en su momento tenía la razón. Nunca me compartieron los cristianos la Palabra ni el Evangelio.

Un día en la crisis familiar donde ya daba por terminado mi matrimonio con mil problemas económicos, familiares, desempleo y demás, mi hermana de sangre me invitó a un encuentro cristiano en una iglesia, no tenía la mínima idea que mi hermana asistía a una iglesia cristiana, nunca me había comentado una sola palabra. Después del encuentro iniciamos nuestra vida cristiana con subidas y bajadas. En un pueblo de Antioquia hace aproximadamente 6 años iniciamos en la casa una serie de reuniones para estudiar la palabra en compañía de un líder cristiano de la iglesia de Cristo al cual contactamos por internet y antes de salir de allí para otro pueblo por cuestiones laborales y de seguridad, dejamos al líder un grupo aproximado de 13 personas, aún se siguen reuniendo con la iglesia de Cristo y han crecido.

Nosotros fuimos invitados a estudiar en Panamá, pero no tomamos la decisión porque no teníamos los recursos económicos puesto que cubrían los gastos de mi esposa, hija menor de edad y los míos, pero nuestros otros dos hijos mayores de edad deberían ser pagados por mí y no tenía el dinero porque era mucho. En el pueblo donde vivimos existen iglesias pero no tienen el Evangelio de Jesucristo. Por lo tanto nosotros por internet vemos predicas y tomamos la cena cada domingo en casa. Compartimos el evangelio de Jesucristo a los conocidos que nos escuchan, estamos lejos de Bogotá y de Girardot para desplazarnos a una congregación y es costoso.

El ILC nos puede ayudar preparándonos para compartir la Palabra de Dios.