Descubrir el Ministerio de Mi Llamado

Mi nombre es Juan Pablo Neira, soy de nacionalidad chilena, tengo 36 años, felizmente casado y esperando el nacimiento de nuestro primer hijo o hija. De profesión, soy docente en Educación Física y magíster en Didáctica de la Educación Física. Actualmente junto a mi esposa, estamos viviendo en Alemania y es en este contexto donde el Señor me ha llamado a prepararme para servirle, así mi corazón lo siente; descubrir el ministerio de mi llamado.

En Chile, conocí al Señor hace 3 años; fue una historia muy rápida pero a la vez la mejor experiencia y decisión que pude haber tomado. Vengo de familia no cristiana, pero mis padres siempre me inculcaron el temor y respeto a Dios. El Señor me llamó mediante mi esposa, quien me acercó a Jesús y me permitió conocerlo, escucharlo y aceptarlo en mi vida, y con la bendición agregada que, sus padres, son pastores ordenados en Chile.

Personalmente, todo ha sido rápido pero Dios ha manifestado Su Voluntad en mi vida mediante Su Palabra, lo que me ha llevado a tomar grandes decisiones a nivel personal, profesional y familiar. Tengo en el último año, un deseo muy grande de servir al Señor de la manera perfecta que Él estime conveniente y así se cumpla el propósito para el cual me creó.

Alemania, es un buen país; lindo en cultura, historia y una experiencia personal muy gratificadora. A la vez es un desafío inmenso por el idioma, lo laboral y lo familiar (Me refiero a padres, hermanos y amigos). Todo quedó en Chile pero Dios es fiel; lo creo y lo confirmo, por que a pesar de estas cosas que acabo de mencionar, nunca, nunca, nos ha faltado nada, en ningún ámbito. Los días que a veces son difíciles, Él levanta mis manos:

«Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo» (2 Corintios 12:9 RVR1960).

…y así lo he experimentado.

Acá en Alemania también asistimos a una iglesia y tenemos nuestro grupo semanal, como también la constante comunicación y comunión con el pastor de habla hispana, pero seguimos junto a mi esposa, perteneciendo y sirviendo a la iglesia en Chile, vía online. Nuestros pastores nos permiten en variadas ocasiones servir a Dios (presencialmente también lo hicimos antes de viajar), por medio de la alabanza en el caso de mi esposa y en la prédica y dirección del servicio a Dios, en mi caso.

Esto último es lo que me ha llevado a buscar mas de Dios, a seguir y conocer a Jesús como Él nos ordenó: «Ven, sígueme» (Lucas 18:22), y en esa búsqueda personal, es que ellos, mis pastores, decidieron apoyarme en esta aventura y es ahí donde encontramos al Instituto de Líderes Cristianos. Ese es el motivo por el cual están leyendo mi testimonio. A través de ILC tengo la expectativa de aprender y crecer en el Señor, y descubrir el ministerio de mi llamado.

El Señor me permitió en mi vida pasada, estudiar y trabajar en lo que me gustaba, el deporte. Hoy quiero complementar eso con lo que Su Propósito en mí quiere hacer. Para eso debo prepararme, equiparme y conocer mediante Su Palabra y mucha oración, lo que Él tiene para mi y mi familia en un futuro que solo Él conoce, pero en el que confió y descanso. La gloria y la honra siempre para nuestro Señor Jesucristo y nos permita encontrar el propósito por el cual nos creó y así de esa manera servirle.